“Toda empresa debería estar en el negocio de Big Data, bueno o por lo menos toda empresa que quiera sobrevivir”, afirma Thomas Friedman en su libro “Gracias por llegar tarde”.
Estamos acostumbrados a grandes cambios en nuestros comportamientos sociales, cada día comienzan nuevos retos en la adopción de nuevas tecnologías que están y seguirán cambiando nuestras vidas, y por tanto la estrategia de las empresas. En este entorno, la banca sigue afrontando el reto de evolucionar tecnológicamente y adaptarse a los nuevos cambios.
De todas las evoluciones tecnológicas de cara al futuro de la banca, es importante destacar el Open Banking (también Open Finance), la Identidad Digital y los pagos electrónicos, temas que fueron abordados por Jonathan Garzón el pasado mes de septiembre en el evento de Freeway Consulting y Salesforce “El Futuro del Sector Financiero” realizado en el Hotel W de la Ciudad de México.
Open Banking
El concepto de Open Banking es la práctica de compartir información financiera electrónicamente de forma segura bajo condiciones aprobadas por el cliente. De tal manera que las personas autorizan a su banco a que comparta la información financiera como saldos, movimientos, deudas, etc, para permitir, después de un análisis de esta información, que se le ofrezcan productos de una manera más personalizada, ya que si bien hoy en día existen algunas aplicaciones que utilizan los datos bancarios para brindarnos información, tecnológicamente no lo están haciendo de la mejor manera, es así como algunas aplicaciones como no le piden al usuario la autorización para pedir la información a tu banco, sino que solicitan la información al usuario (usuario y contraseña) para entrar al banco haciéndose pasar por el y tener acceso a su información financiera. Este tipo de transacciones no son recomendables ni por los bancos que han alertado desde hace tiempo no compartir estos datos con nadie.
La forma como se debería hacer es a través de APIs, en donde nunca compartes el usuario ni la contraseña de tu banco, sino que a través de estas, otorgamos permisos para que cierta información, controlada por el usuario y bajo estrictas medidas de seguridad sea compartida.
¿Qué logramos con Open Banking?
Toda esta información disponible, según esta nueva práctica, permite que el dueño de la información financiera puede tener el control de quién y para qué la puede utilizar. Así la información financiera estaría disponible de una forma centralizada para pagos (por ejemplo), decidir tomar un préstamo, apertura y cierre de cuentas, etc. De esta forma se rompe el paradigma de quién es el dueño de la información ya que deja de ser del banco para ser del individuo.
Así, del lado de las entidades financieras, el beneficio es tener un panorama total de la identidad financiera de cada individuo, facilitando el perfilamiento de los clientes para personalizar productos y ofrecerlos a medida. También, se reduce el riesgo crediticio por falta de información financiera de otras entidades.
Identidad Digital
Cada país es distinto, pero en México, las identificaciones más comunes son: el INE, la CURP, el pasaporte, el número de seguridad social, el RFC, etc. El problema es que estas identificaciones no están relacionadas entre sí, además no tenemos control sobre quién o qué entidad tiene nuestra información, qué datos tiene y qué hace con ellos, es decir, no tenemos un control sobre nuestra propia información.
De la misma manera las entidades tanto gubernamentales como privadas tampoco tienen certeza de que la identificación es del individuo que la porta.
El reto para México es lograr integrar en un solo ente cualquier tipo de identidad (concepto conocido como Identidad Federada) para garantizar la validez de esa identidad al igual que su consulta. Y, por otra parte, está el concepto de Identidad Soberana, que obliga a pedir mi autorización solo para consultar mi identidad para compartirla, al igual que especifiquen quién solicita la información y para qué fin la está solicitando.
Pagos Inteligentes
Hoy, la mayoría de nosotros tenemos “domiciliados” algunos pagos ya sea a nuestra tarjeta de crédito o a alguna de las cuentas de nuestros bancos. Es decir, tenemos pagos automáticos que en algún momento hemos autorizado por conveniencia. Esto sin contar con otros pagos que hacemos en persona. Si observamos, en muchos casos la experiencia de pago es complicada.
Hacemos tantos pagos que no es difícil que se nos olvide alguno o que estemos pagando algo de manera recurrente que necesitamos, pero el problema es que tenemos tantos medios diferentes, que puede salirse de control. ¿Cuántas aplicaciones tienes en tu celular solamente para realizar un pago? Lo que cambia con los pagos inteligentes es hacer más fácil los pagos e integrar todos en una misma plataforma buscando mejorar la experiencia de pagos.
Transformación Digital de la Banca en México
Wikipedia, define la transformación digital como: “el cambio asociado con la aplicación de tecnología digital en todos los aspectos de la sociedad humana”.
Según este concepto, la transformación digital está basada en “el cambio asociado con la aplicación de tecnología digital”, es decir, con la adopción cultural de nuevas tecnologías. Y esta cultura se debe cambiar inicialmente dentro de las empresas, no solamente con la adopción de la última tecnología, sino en la transformación de la mentalidad de las personas dentro de las instituciones, hacia el nuevo paradigma que corren estos tiempos.
Para poder acelerar esta transformación, compañías como Salesforce, con su plataforma Financial Services Cloud de la mano de integradores como Freeway Consulting, Gold Consulting Partner de Salesforce, están cada vez más comprometidos con el desarrollo de soluciones diseñadas a la medida de las empresas de servicios financieros de cualquier tamaño, permitiendo aportar una nueva experiencia a los clientes y que satisfaga las nuevas tendencias del mercado. Una banca centrada en el usuario y en la individualización de los productos según sus necesidades.
